El mundo nerd de hoy es distinto al de hace treinta años; si bien es cierto se le relaciona con alguien que es muy estudioso y carente de vida social, ahora también se le define como el amante de la cultura pop.
Esta revolución se dio a partir de la serie televisiva estadounidense “The Big Bang Theory” que muestra de manera ocurrente el fanatismo de cuatro amigos por la cultura pop, en este caso la cultura cómic. Si la “Revancha de los Nerds” (película estadounidense dirigida por Jeff Kanew en 1984), les dio voz, esta serie terminó por darles no sólo un espacio más amplio, sino también identidad.
El nerd de ahora no se oculta, es más, se siente orgulloso de serlo.
En el ‘mundo nerd’, se puede ser nerd de cualquier cosa, tal como lo afirma Wil Wheaton (escritor y actor estadounidense); según él, se puede ser nerd de cine, libros, series… porque una persona que sabe mucho de cierto tema y además muestra su pasión exacerbada por ello puede ser clasificada como nerd.
No hay que negar que entre más conocimiento se tenga del tema, es mejor, porque no es la visión de un simple fan consagrado; es la visión del nerd que todo lo sabe y si lo sabe es cierto, pues es un vínculo que se tiene con el producto cultural, con la fascinación que se tiene y ese vínculo es tan contagioso que lleva a otros a que se fanaticen y por ende conozcan más de ese producto cultural. Por eso la cultura pop, dejó de ser algo banal, un simple entretenimiento de las masas superficiales, pues el nerd aprovechando su conocimiento comenta de el, postea sobre él, lo da a conocer, expande el producto.
Tal vez en el fondo todos somos nerds, todos somos expertos y conocedores de algún tema en específico, tema que nos produce pasión y de cierta manera orgullo, porque ¿a quién no le gusta hacer alarde de sus conocimientos?
Y la cultura pop no es la excepción, como pueden ver nada es tan superficial como parece ser.