Este 30 de julio se cumplen 158 años del nacimiento de Henry Ford, un visionario fabricante de automóviles que revolucionó la historia de la industria automotriz.
Mucha gente piensa que Henry Ford inventó el automóvil, no fue así. Este empresario hizo posible el sueño de poseer un automóvil para millones personas, gracias a su proyecto de producción en serie que implementó con el modelo T.
El Ford T apareció en el mercado el 1 de octubre de 1908 con una serie de innovaciones con respecto a sus competidores.
El auto era sencillo, fácil de reparar y muy económico, su precio era de 825 dólares y el objetivo era que cada año costara menos.
Finalmente, en 1913 Henry Ford desarrolló una nueva línea de producción para su modelo T. Con este nuevo método los costos de mano de obra y producción bajaron considerablemente, y por lo tanto los precios de los autos también.
Para 1914 el Ford T ya costaba 500 dólares y para 1916 solo 360 dólares.
Algunos datos del Ford T
La producción en serie de Ford alcanzó tal éxito que en 1918 la mitad de los autos de Estados Unidos eran el modelo T de Ford.
El único color disponible era negro, esto era así porque el esmalte negro es el que más rápido secaba.
En sus casi 19 años de producción, el Ford T tuvo muy pocos cambios. La mayoría fueron en los materiales de fabricación.
El Ford T marcó la estandarización de la posición del volante del lado izquierdo. Antes del T, cada fabricante lo ubicaba donde le parecía mejor: izquierda, derecha o centro.
El Ford t estaba impulsado por un motor 4 cilindros de 2.8 litros que generaban apenas 22 HP. Podía alcanzar una velocidad de 64 km/h.
La historia del Ford T terminó en 1927, cuando salió de la línea de producción el modelo T número 15,007,034.