Una vez más, recordamos los fabulosos ochenta, y su comida… unas ricas y deliciosas hamburguesas, como las de Burger Boy y Tomboy.
En esa década comenzaba la comida rápida a entrar a nuestros hogares y poco a poco fue creciendo el número de estos establecimientos.
La competencia empezaba y en ocasiones nos encontrábamos con algunos dilemas por saber a qué lugar ir a comer; obviamente, había algunas cosas favoritas en unos y otras pues en otros.
La mayoría de las personas preferían Burger Boy; esto porque tenían mucha publicidad súper divertidad, con comerciales donde podíamos ver a Salma Hayek vestida como caperucita comiendo una rica hamburguesa. Y qué decir de los comerciales con dinosaurios, pues eran los animales que daban nombre a sus hamburguesas estrella. Además, acá entre nos, eran más baratas.
Burger Boy comenzó en la década de los setenta y tuvieron un mayor número de sucursales ya en la década de los ochenta, era el lugar de comida rápida más famoso de México.
Como decía anteriormente, tuvieron un menú muy característico que casi nadie olvida; se trata del nombre de sus hamburguesas; empezamos con la unifante, seguimos con una brontodoble y terminamos, para los tragones, con una dinotriple.
Amamos a los dinosaurios por aquellos nombres tan originales de la época, y no se trataba de película alguna o moda en juguetes, eran simplemente, nombres tan fuera de serie o no tan común, que a la fecha uno no olvida.
Y por si esto fuera poco, también se complementaba con unos popotes de plástico de colores y en espiral, los llamados locopopotes. Espero muchos lo recuerden. Manteles de papel, una mesa cómoda, sillas encantadoras; simplemente se trataba de un buen lugar para ir a comer y sobre todo de disfrutar cada minuto que estuvieras en él.
¿Pero, qué sucedió con Burger Boy?, pues la competencia de un grande, como lo era o es McDonalds, terminó por sacarlo del mercado.
En la década de los setenta, en 1974 para ser exactos, Roberto González Barrera, el dueño de Grupo Maseca compra la cadena conformada por más de 50 sucursales a su cargo, pero ni así pudo salvarse, por lo que terminaron cerrando.
Años después, en 2015, surgió el proyecto de revivir Burger Boy. Todos nos emocionamos con la idea de revivir esos momentos, pero todo quedó en un sueño, y en 2019 se reveló que por una mala planeación todo se arruinó, aunque actulmente están vendiendo la marca, quién quite y alguien con más visión sí consiga traer de vuelta la cadena.
Ahora, referente a Tomboy, ésta nace en los setenta con grandes sucursales, casi siempre en el sur de la Ciudad de México y en el puerto de Acapulco, muy grandes, cómodas, y por lo regular con un concepto nuevo, que era, mesas y sillas afuera para que pudieras disfrutar desde otro ambiente.
Tomboy siempre fue más caro y era más para chavos que para niños. Contaban con grandes estacionamientos, pues empezaba a darse la moda de poder pedir desde el coche.
El menú era diferente, y aunque se tratara de hamburguesas también, éstas no tenían esos nombres, pero sí unas deliciosas malteadas.
Todos éstos establecimientos, empiezan a verse afectados por la competencia tan desleal que hay con uno que viene de nuestro vecino país del norte, que a la fecha ha permanecido y la verdad no son ni la mitad del sabor que tenían nuestras hamburguesas.
Actualmente solo nos queda el recuerdo de esos maravillosos lugares, que además del mejor sabor tenían alma, cosa que no tienen los restaurantes de hamburguesas en la actualidad.
¿Los recuerdas? Compártenos tus memorias, si llegaste a visitarlos y si tienes alguna anécdota inolvidable de ellos.
Para seguir recordando, mira el programa donde platicamos sobre estos y otros restaurantes y cafeterías que ya no existen.