Las marcas de cualquier producto cuentan con un buen eslogan, ya sea para mostrar cierto atributo, generar recordación o buscar identificarse con los clientes, como el caso de Just Do It.
La mayoría de las veces para pensar estos lemas; se reúnen los expertos y estudian el producto para dar con la frase precisa que se quedará impresa en la memoria del colectivo y en muchos casos perdura al paso del tiempo convirtiéndose en reconocimiento casi mundial.
No todas las ideas nacen o llegan después de un duro trabajo donde la imaginación es ingrediente vital; a veces detrás de la marca o del eslogan (como en este caso); hay historias que no son muy felices, a veces esas ideas vienen y provienen de ideas y de personas de las que uno menos imaginaría.
Como en el caso de Nike, que como todos sabemos es una marca bastante reconocida en proveer calzado, ropa deportiva y equipos deportivos; además de ser reconocida a nivel mundial ha sido patrocinador, proveedor y titular oficial de varios equipos de fútbol.
Su lema: ‘Just Do It’, que suena bastante inspirador; nace de las últimas palabras dichas por Gary Gilmore, que después de una carrera larga delictiva, fue condenado a muerte en 1976 por el cargo de dos homicidios en Utah.
Fue frente al pelotón de fusilamiento que vendado pronunció las palabras que inspiraron el logo de la marca: ‘let’s do this’ o ‘hagámoslo’.
Dan Wieden, ejecutivo de publicidad lo cambió por ‘just do it’, lo que dio inicio a la historia de una marca de peso: “necesitamos una frase para unir todas estás cosas”.
Una frase dicha por un homicida antes de su condena; una frase que por muchos años pasó desapercibida, hasta por el cuerpo de pelotón que lo fusiló; con el tiempo y gracias al publicista que le dio un nuevo sentido, el eslogan se convirtió en sinónimo de victoria y de superación para el deportista.