David Bowie rompió todos los esquemas y su arte sigue trascendiendo al paso del tiempo.
El origen de un ícono
David Robert Jones, mejor conocido como David Bowie, nació el 8 de enero de 1947 en el barrio de Brixton, el cual se encuentra en Londres, Inglaterra. Desde niño mostró grandes aptitudes artísticas y a los 8 años empezó a tomar clases de canto.
Influencias iniciales y primeros pasos en la música
Sus primeras influencias musicales fueron de artistas de rock and roll como Elvis Presley, Chuck Berry y Little Richard, de quienes hacía imitaciones para su grupo de boy scouts; posteriormente conoció el Jazz, género que igualmente le encantó, aunque siguió enfocado en el rock and roll, especialmente cuando formó Kon-rads, una banda en la que tocaban temas de este género en fiestas.
Por esta época, se vio envuelto en un “lío de faldas”, cuando se peleó con George Underwood, quien le dio un puñetazo en el ojo, lo que provocó que se quedara con la pupila dilatada de forma permanente. Esto le dio el aspecto de tener heterocromía, es decir, los ojos de distinto color, sin embargo es la dilatación de pupila la que da este aspecto.
Jones seguía teniendo un creciente deseo de convertirse en estrella musical, sin embargo no recibió mucho apoyo de su familia y veía cómo sus compañeros de banda no compartían los mismos deseos. A pesar de todo, Jones formó una nueva banda, The King Bees, con la que empezaron una intensa campaña de promoción que no trajo buenos resultados, por lo que optó por unirse a The Manish Boys, con quienes tampoco le fue bien. Después de unirse a Lower Third y volver a fracasar, David consideró la posibilidad de abandonar la música y dedicarse al teatro, pero permaneció un tiempo más en el grupo, después se unió a The Buzz, pero la cosa parecía no mejorar.
La transformación: de David Jones a David Bowie
David se dio otra oportunidad y se lanzó como solista, pero le sugirieron cambiar su nombre artístico, ya que se prestaba a una confusión con Davy Jones, vocalista de The Monkees, por lo que se lo cambió por David Bowie, en honor a James Bowie, un mercenario estadounidense.
Gracias a este cambio de nombre y el lanzamiento de solista, las cosas empezaron a cambiar para David Bowie, pues el éxito llegó, aunque muy lentamente. Se lanzó el single “The Laughing Gnome”, con el que entró por primera vez a las listas de popularidad del Reino Unido. Posteriormente apareció su primer álbum, al cual no le fue muy bien. Dos años después lanzó el segundo, el cual también se llamaba “David Bowie” (rebautizado posteriormente como “Space Oddity”), con el que llegó al primer lugar de los charts con el tema “Space Oddity”, aunque fue la única canción exitosa de este disco, el cual estaba ya más inclinado al rock.
El ascenso de Ziggy Stardust y el camino al estrellato
Posteriormente llegaron discos como “The Man Who Sold the World”, “Hunky Dory”, “The Rise and Fall of Ziggy Stardust and the Spiders from Mars”, “Aladdin Sane”, “Pin Ups” y “Diamond Dogs”, pero fue hasta 1975 que lanzó “Young Americans”, el cual incluía el tema “Fame”, con el que alcanzó el número 1 del Billboard por vez primera, aunque ya había logrado éxitos menores, pero inolvidables con temas como “Changes”, “Starman”, “The Jean Genie” y “Rebel Rebel”.
Luego de estos éxitos, llegaron otros como “Golden Years”, “TVC 15” y “Sound and Vision”. Su primer éxito de los 80 fue “Ashes to Ashes”, del disco “Scary Monsters (and Super Creeps)”, con el cual buscó un sonido un poco más comercial. Al año siguiente llegó “Under Pressure”, en el cual colaboró con Queen y significó un gran éxito para ambas partes.
Por cierto, David Bowie tuvo más duetos importantes con artistas como Bing Crosby (“Peace on Earth/Little Drummer Boy”), Tina Turner (“Tonight”), Pat Metheny Group (“This Is Not America”), Mick Jagger (“Dancing in the Street”), Pet Shop Boys (“Hallo Spaceboy”), Placebo (“Without You I’m Nothing”) y David Gilmour (“Arnold Layne”),
Éxitos Inolvidables: “Young Americans” y “Let’s Dance”
Volviendo a los 80, todos recordamos el álbum “Let’s Dance”, producción de 1983 que le valió otro primer lugar en el Billboard, gracias al tema del mismo nombre. Este disco, mucho más comercial que los anteriores y plagado de toques dance, fue producido por Nile Rodgers, algo que sorprendió a propios y extraños. Gracias a esta unión de talentos, “Let’s Dance” se convirtió en el disco más exitoso de la carrera de Bowie.
Con el fin de los 80, también se acabaron los éxitos en los charts norteamericanos para el cantante, pero es algo que poco le importó pues, para ese entonces, Bowie ya estaba más allá de la linea del bien y del mal, tenía derecho a hacer prácticamente lo que le viniera en gana.
Apenas el 8 de enero de este año, David Bowie había lanzado “Blackstar”, el disco 27 del artista. De éste ya habían aparecido 2 singles, “Blackstar” y “Lazarus”.
David también se dedicó a la actuación, su primera participación en el cine fue en el corto “The Image”, también estuvo en producciones como “The Man Who Fell to Earth”, que le hizo ganar un Saturn Award como mejor actor y “Zoolander”, con el que fue nominado en los MTV Movie Awards. Participó en más de 30 películas.
Su vida personal y el legado duradero
Sobre su vida personal, es bien sabido que Bowie era bisexual, lo cual trajo diversas opiniones y declaraciones tanto de medios, como de cercanos al artista e incluso del propio Bowie. David comentó que se sentía un tanto arrepentido de sus declaraciones, pues no deseaba convertirse en abanderado de ningún grupo de personas. No buscaba algo que ocurrió, que se hablara más de su orientación sexual que de su trabajo como músico y actor. Hay quienes dicen que este comportamiento del artista respondía más a buscar ser irreverente y romper con los esquemas establecidos y obligados en lo que a sexualidad se refiere, se dijo incluso, que todo fue una estrategia de publicidad para llamar la atención.
Bowie se casó dos veces, ambas con modelos (nada perdido el señor). La primera esposa fue Angela Barnett, con quien engendró a Duncan Jones, quien es actualmente director de cine. Su segundo matrimonio fue con Iman, con quien tuvo a su hija Alexandria Zahra Jones.
En 2014, David Bowie recibió la noticia de tener cáncer de hígado, sin embargo no la hizo pública y continuó trabajando. 18 meses después de recibir el diagnóstico, David Bowie falleció en su casa de New York, dejándonos un gran historial de éxitos y temas inolvidables, mismos que le hicieron merecedor a 2 BRIT Awards, 1 Daytime Emmy Award, 2 Grammy, 1 Ivor Novello Award, 3 MTV Video Music Awards, 1 MuchMusic Video Award, 1 Q Award, 1 Saturn Awards, 1 WB Radio Music Award y 1 Webby Award. Acumuló en vida un aproximado de 140 millones de discos vendidos.
Bowie, un Viaje Musical que Perdura
David Bowie no solo fue un músico, fue un narrador de historias a través de acordes y letras. Su capacidad para desafiar las normas, fusionar géneros y reinventarse continuamente lo eleva a la categoría de leyenda. Su legado, marcado por éxitos atemporales y una influencia que perdura en artistas de todas las generaciones, garantiza que la estrella de Bowie siempre brillará en el firmamento musical.
En este viaje a través de la vida y la música de David Bowie, hemos explorado las múltiples facetas de un genio creativo. Su impacto va más allá de las estadísticas de ventas y los premios, resonando en el corazón de quienes han encontrado consuelo, inspiración y alegría en su arte. A medida que recordamos a Bowie, celebramos un legado que seguirá vivo mientras la música siga sonando.