La inspiración y las canciones de Robert Johnson convirtieron a este misterioso y polémico hombre en la leyenda del Delta Blues.
Para quienes amamos la música, al menos una vez en nuestro repertorio hemos escuchado canciones de blues, género que surgió en los Estados Unidos a finales del siglo XIX.
Tal vez sea su ritmo, sus letras o el ambiente al que nos transporta lo que nos gusta de ellas. Sin embargo, pocos conocemos al misterioso Robert Johnson, quien tal vez sea el pionero de dicho género musical y que ha inspirado a leyendas de la talla de The Allman Brothers, Bob Dylan, Eric Clapton, Led Zeppelin y a los grandiosos The Rolling Stones.
Robert Johnson nació el 8 de mayo de 1911 y falleció el 16 de agosto de 1938, contando solo con 27 años. Su poderosa voz, sus habilidades con la guitarra acústica y, sobre todo, los temas que contenían sus letras son las razones por las que se cree que hizo un pacto con el diablo.
Conteniendo en su repertorio escasamente 29 canciones, este joven proveniente del condado de Hazlehurst, Mississippi, en los Estados Unidos, tuvo que dejar su ciudad natal a los dos años debido a que la mafia o los terratenientes querían linchar a su padre, lo que obligó a que creciera en los condados de Robinsonville y Tunica.
Los registros de su juventud (de los cuales existen muy pocos) sugieren que tuvo una buena educación. Robert ya mostraba cierta habilidad para tocar la armónica y el arpa de boca durante este período.
Fue perseguido por la mala suerte, ya que a los 18 años decidió casarse con su novia de entonces, Virginia Travis, quien tenía 16 años; ella falleció durante el parto. Mack McCormick (musicólogo y folklorista) lo llamó un “castigo divino” por cantar canciones laicas y por haber sido un mal marido, al dedicarle toda su vida a la música en lugar de a su familia.
En 1932, volvió a casarse con Caletta Craft, quien también murió en el momento del parto. Tomó la decisión de volverse un músico itinerante (como si de un vagabundo se tratara) por su depresión tras su pérdida.
Es en este lapso donde nace su mito: se dice que, viviendo en una zona rural, Robert quería ser el mejor cantante de blues, pero no teniendo las habilidades necesarias, le fue recomendado llevar su guitarra a un crucero cerca de la plantación Dockery. Aquí fue encontrado por un hombre alto y oscuro, quien afinó su guitarra y se la regresó, dándole esta habilidad, todo esto a cambio de su alma.
“Hellhound On My Trail” (El Perro Infernal Tras Mis Huellas), “Cross Road Blues” (El Blues del Crucero), “Me and The Devil Blues” (El Blues del Diablo y Yo) y “I Believe I’ll Dust My Broom” (Creo Que Empolvaré mi Escoba) son algunas de sus canciones más famosas. De hecho, la mayoría de sus letras tratan temas como el sexo, la muerte, la rebeldía y el sufrimiento, por mencionar algunos.
En un capítulo de la serie de televisión “Supernatural”, titulado curiosamente “Crossroad Blues”, se le hace una especie de homenaje a su talento y su historia.
En el cine, cintas como “Crossroads” (1986), “Pawn Shop Chronicles” (2013) y “Tenacious D in The Pick of Destiny” (2006), tienen una notable inspiración en la historia de Johnson.
Para los amantes del folk rock, rock o jazz, Robert Johnson es una muy buena opción para escuchar y es catalogado como el quinto mejor guitarrista de toda la historia.
