Uno de los autos más icónicos que ha circulado en México es sin duda es el Vocho, un auto alemán adoptado por los mexicanos.
Se dejó de fabricar hace más de 19 años, sin embargo aun se recuerda con mucho cariño, pues fue mucho más que un simple auto. Para muchas familias significa el primer medio de transporte y compañero de muchas aventuras.
Breve historia
Para entender la historia del Vocho, es necesario conocer a su creador. Ferdinand Porsche nació el 3 de septiembre de 1875 en un territorio que en ese entonces formaba parte del imperio Austrohúngaro.
Desde pequeño se interesó por todo lo que tuviera que ver con tecnología y motores. Más tarde inició sus estudios en la escuela de comercio de Reichenberg y pronto comenzó a trabajar en la Compañía Eléctrica Unida donde al poco tiempo era el encargado del taller experimental.
Luego de pasar por diferentes empresas, Porsche abrió su propio taller en Stuttgart, donde se dedicó a fabricar motores y a diseñar un vehículo pequeño de bajo costo que apoyara al pueblo con la situación económica de entreguerras.
Durante la Segunda Guerra Mundial, Adolf Hitler fue informado de estos proyectos y decidió encargar un auto para el pueblo que representara al imperio nazi. El Führer sabía mucho de autos y el mismo pidió las especificaciones de como quería que fuera el auto del pueblo:
Un auto familiar de cuatro plazas con motor enfriado por aire y capacidad de 1 litro. Debía tener un consumo de 7 litros de gasolina por cada 100 Km y alcanzar una velocidad de al menos 100 Km/h.
Llegó a México
En 1954, con motivo de la exposición “Alemana y su industria” que se llevó a cabo en Ciudad Universitaria, llegaron a México cuatro modelos de Volkswagen: dos Sedan 113 versión Export, un modelo Cabriolet y una Transporter. Ese mismo año abrió el primer punto de distribución de VW en la Ciudad de México.
En 1962 se fundó la planta de ensamblaje de VW en México y en 1964 se creó formalmente la empresa Volkswagen de México, cuyas primeras instalaciones estaban ubicadas en Xalostoc y más tarde se mudaría a Puebla.
Desde su llegada a México, el Vocho tuvo una gran aceptación que lo llevó al éxito.
En la década de los 60, México ya contaba con casi cuarenta distribuidoras de la marca que alcanzaban ventas de hasta 6,378 Vochos cada año.
En 1968, el Vocho tomó el puesto del auto más vendido de México. Las cifras dicen que 21.8% de los autos circulando en el país eran un VW Sedán.
El Vocho alcanzó el mayor de sus éxitos cuando en febrero de 1972, superó el récord de producción del modelo T; alcanzando un total de 15,007,034 unidades fabricadas.
Gracias a su rendimiento de combustible, resistencia y fácil reparación, fue que los taxistas lo convirtieron en el modelo preferido, pues todas las características reunidas en el Vocho lo hacían ideal para el trabajo diario.
Todo tiene un final
En julio de 2003, debido a la poca rentabilidad del auto, se decidió terminar su producción y se despidió con una edición especial llamada “Sedán Última Edición”, de la cual hubo tres mil unidades.
A las 9:05 horas del 30 de julio de 2003, la línea de producción del Sedán se detuvo, poniendo fin a una historia de éxito.
Después de una producción de 21,697,542 Vochos fabricados en nuestro país en el periodo de 1954 a 2003 salió de la planta de Puebla el último Volkswagen Sedán del mundo.
El Sedán Última Edición contaba con las siguientes características:
- Colores: azul aquarius con interiores en gris y beige luna con interiores negros.
- Molduras: cromadas en el cofre y costados, así las defensas y los espejos laterales.
- Neumáticos: de cara blanca montados en rines pintados al color de la carrocería sin dejar de integrar los clásicos tapones cromados.
- Emblema: llevaba el símbolo de Wolfsburg en el cofre.
- Tablero: pintado al color de la carrocería.
- Piso: totalmente alfombrado.
- Audio: Sistema con CD, con dos bocinas en las puertas, dos en la sombrerera y paquete acústico antiruidos.
A nivel mundial, el Volkswagen Sedan tuvo una producción de 65 años que comprende el periodo 1938 a 2003. Esto lo hace tener el récord del auto con mayor tiempo de producción en toda la industria automotriz.