Pedro Infante y Jorge Negrete unieron fuerzas en Dos tipos de cuidado, una película que capturó el corazón del público y se convirtió en un ícono cultural del México de los años 50.
Una joya del cine mexicano que perdura en la memoria
En agosto de 1952 comenzó el rodaje de Dos tipos de cuidado, una de las películas más queridas y emblemáticas del cine mexicano. Protagonizada por Pedro Infante y Jorge Negrete, dos leyendas absolutas de la Época de Oro, esta comedia se estrenó el 5 de noviembre del mismo año en los cines Mariscala de la Ciudad de México. Su poderosa combinación de humor, carisma y talento actoral la convirtió en un clásico inmediato.

Amistad, enredos y mucho carisma
Dos tipos de cuidado cuenta la historia de dos entrañables amigos: Jorge Bueno (interpretado por Negrete) y Pedro Malo (a cargo de Infante). Ambos comparten una vida llena de fiestas, juegos… y un gusto particular por las mujeres. Pero las cosas se complican cuando entran en escena Rosario (Carmelita González), prima de Pedro y pretendida por Jorge, y María (Yolanda Varela), hermana de Jorge y enamorada de Pedro.
El juego de enredos amorosos y lealtades pone a prueba la amistad entre los protagonistas, mientras el público disfruta de cada momento con risas, nostalgia y emoción. La dinámica entre Infante y Negrete es simplemente mágica, con diálogos brillantes y situaciones cómicas que reflejan de forma ligera los valores y contradicciones de la época.

Una producción con sello de leyenda
Dos tipos de cuidado fue escrita y dirigida por el gran Ismael Rodríguez, y producida por David Negrete. Esta cinta se convirtió rápidamente en una obra única, no solo por sus actores principales, sino por el equilibrio que logra entre humor, crítica social y entrañables personajes.
Entre las escenas más memorables se encuentra la icónica escena de las “Coplas”, un duelo musical cargado de picardía y estilo ranchero que ha sido imitado y recordado por generaciones. Incluso muchos jóvenes de hoy reconocen este momento sin haber visto toda la película. Es un fragmento que ha trascendido el tiempo.
Legado y reconocimiento
Con el paso de los años, el impacto de Dos tipos de cuidado no ha disminuido. En 1994, la revista Somos la colocó en el lugar 34 de su lista de Las 100 mejores películas del cine mexicano, basada en la opinión de 25 críticos y especialistas del país. Este reconocimiento consolida su lugar como una pieza fundamental del patrimonio cultural fílmico mexicano.
Más allá de la lista, esta película sigue viva en la memoria colectiva, en las reuniones familiares donde se vuelve a ver, en las redes sociales donde se comparten fragmentos, y en la música popular que acompaña cada una de sus escenas.