Desde 1974, cada 5 de junio se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente luego de que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) lo decretara en diciembre de 1972. Más de 40 años después, parece que no hemos entendido nada.
No puede ni debe quedar como una jornada más, debe ser la demostración del compromiso mundial por la protección de nuestro Planeta, un momento para “actuar con contundencia”, como menciona el Secretario General de Naciones Unidas, António Guterrez.
Concretamente, esta edición se dedica a la lucha contra la contaminación atmosférica y los principales actos oficiales se celebran en China, uno de los países más afectados por el deterioro de la calidad del aire —aunque en México no nos quedamos atrás— y también uno de los que más ha actuado en los últimos años para revertir esta situación (China).
Pero no nos engañemos, ya todos sabemos lo que está pasando, y sabemos cómo empezar a reparar el problema, pero si no sabes por dónde empezar, en Looking Back te damos algunos puntos sencillos para que aportes lo que te corresponde.
- Apaga las luces y los aparatos electrónicos que no estén en uso, asimismo, desconecta cargadores que no estés aprovechando.
- Si fumas, no lo hagas en espacios cerrados. Es mejor salir a una terraza, o una zona habilitada para fumadores.
- Considera el reciclaje de productos, aprovecharás los recursos y se evitará algunos procesos de fabricación que producen contaminantes.
- Como generadores de oxígeno, las zonas verdes son importantes para las ciudades, por ello es necesario preservar e impulsar espacios con árboles y plantas.
- Cuando fríes alimentos, contaminas el aire de tu casa. Procura abrir las ventanas para ventilar la cocina.
- Comprueba la eficiencia de los sistemas de calefacción y las estufas, para utilizar modelos ahorradores.
- No quemes basura ni llantas, tampoco uses pirotecnia, ya que afecta directamente a la contaminación atmosférica y auditiva.
- Consume alimentos orgánicos, o comprueba que no hayan sido sometidos a un uso tan intensivo de agroquímicos. O bien, puedes cultivarlos en tu azotea con composta hecha por ti.
- No tires basura en la calle (obvio), ni en bosques o parques. Guárdala o tápala bien hasta depositarla en un contenedor.
Con estas acciones, sencillas pero poderosas, mejoras tu calidad de vida, la de tu entorno y de paso tu economía.
