A lo largo de la historia se ha tenido como costumbre utilizar términos procedentes de nombres propios (epónimos).
Es muy común que en prácticamente todas las áreas de conocimiento, surjan inventos que lleven el nombre de quien fue su descubridor.
Joseph-Ignace Guillotin: Guillotina
En sus orígenes, la guillotina fue diseñada ante los métodos inhumanos de ejecución: arder, colgar, estirar y descuartizar. A finales de 1780, en Francia, Guillotin ofreció la fabricación de una máquina bien diseñada, más contundente y evitando la tortura. La propuesta fue aceptada y las máquinas se distribuyeron por todo el país. Al final de la Revolución Francesa, la guillotina se había utilizado para ejecutar a más de 15,000 personas.
Rudolf Diesel: Diesel
Conocedor de arte, lingüista y teórico social. Inventó el motor de combustión interna que lleva su nombre, concebía al motor diesel como un motor adaptable que permitía a los ingenieros independientes competir con las poderosas industrias de motores y combustibles.
Los Hermanos Jacuzzi: Jacuzzi
A raíz de los problemas de artritis de un miembro de la familia, un grupo de siete hermanos emprendedores, inventó una bomba de hidroterapia para el baño. Funcionó, y la bomba portátil, llamada J-300, fue fabricada y vendida a hospitales y escuelas.
Años más tarde, un miembro de la tercera generación de la familia, promovió el negocio cuando fabricó y comercializó el primer baño de hidromasaje al incorporar chorros en los laterales de la bañera. Es así como nació el jacuzzi.
Jules Léotard: Leotardo
Jules Léotard – Francia 1842- fue un trapecista del Circo Franconi. Siempre será recordado por prestar su nombre al traje que realizó. El leotardo original, era un traje de una sola pieza que permitió la libertad de movimiento. Dicho traje era aerodinámico y no tenía tela extra para conseguir engancharlo en las cuerdas.
John Montagu, cuarto Conde de Sandwich: Sándwich
John Montagu, el cuarto conde de Sandwich, fue una notable figura política y militar en la Gran Bretaña del siglo XVIII. Creó el sándwich como una práctica comida que le permitía alimentarse sin tener que moverse de su asiento, durante extenuantes horas en la mesa de juego.
