Gracias a su imparable trabajo, Vicente Fernández se convirtió en un ícono de la música ranchera por varias generaciones.
Vicente Fernández fue sin duda uno de los interpreteres más destacados de la música ranchera desde sus inicios en década de los 60, y aunque se retiró desde hace años, su muerte deja un vacío que nadie podrá llenar.
Su nombre completo, Vicente Fernández Gómez, nació el 17 de febrero de 1940 en Huentitán El Alto, en el estado de Jalisco.
Su mayor sueño: Cantar
Vicente Fernández encontró desde los primeros años de su vida un lugar muy especial en la música, soñaba con ser cantante a los 6 años y aprendió a tocar la guitarra a los 8.
Comenzó a ver películas de Pedro Infante a los 6 años y le dijo a su mamá que algún día llegaría a ser como él.
A los 14 años participó en competencias amateur en Guadalajara, en 1954 obtuvo el primer lugar en esta categoría.
Luego de esta competencia, Vicente comenzó a ofrecer sus servicios como cantante en fiestas y restaurantes.
El amor de Vicente Fernández y Cuquita
Para Vicente Fernández, 1963 fue un año de altibajos muy marcados, principalmente por la muerte de su madre, Paula Gómez de Fernández, diagnosticada de cáncer a los 47 años.
Sin embargo, a finales de año, Fernández se casó con María del Refugio “Cuquita” Abarca Villaseñor, una joven vecina de Vicente, cuando vivía en Guadalajara.
Este matrimonio tuvo cuatro hijos: Vicente, Gerardo, Alejandro y Alejandra.
A los 24 años, Fernández aparece junto a mariachis como Amanecer de Pepe Mendoza o Mariachi de José Luís Aguilar, presentándose en restaurantes.
El ascenso al éxito
La vida de Don Vicente cambió radicalmente cuando su amigo Felipe Arriaga lo invitó a participar en el programa radial “Amanecer tapatío”.
Para 1965, Vicente ya había tocado las puertas de varias disqueras sin tener éxito. Fue solo cuando llegó a la XEX que Vicente pudo llegar a un público más amplio.
En 1966, con la muerte de Javier Solís, las puertas del éxito se abren para Vicente Fernández y las discográficas comienzan a buscar nuevos talentos en el género ranchero.
Vicente Fernández firmó contrato con CBS (hoy Sony Music) para grabar sus primeras canciones: “Tu Camino y El Mío”, “Perdóname” y “Cantina del Barrio”.
No alcanzó la fama internacional hasta 1976, cuando interpretó la canción “Volver, Volver”, tema considerado actualmente uno de los himnos de la música ranchera.
Vicente Fernández rompió todos los récords de Estados Unidos, México y Sudamérica con esta canción.
Ese año, Vicente Fernández fue nombrado nuevo rey de la música ranchera.
Vicente, el actor
La vida de Vicente Fernández no solo estuvo ligada a la música, sino que también incursionó en el cine. Algo muy común en aquella época era que los cantantes recurrieran a la actuación para aumentar su notoriedad y llegar a una audiencia internacional.
Entre las películas más destacadas del El Charro de Huentitán se encuentran “Ley del monte”, “El hijo del pueblo” y “El tahur”. Su debut en el cine fue en la película “Oh, Delilah”, de 1969, aunque su primer protagónico llegó tres años después, en la comedia “Tacos al carbón”.
Es difícil hacer una breve lista de sus discos más exitosos, pero entre ellos encontramos “El ídolo de México”, “El Rey”, “Para Recordar” y, por supuesto, “La Ley del Monte”.