Por fin se estrenó “Kung Fu Panda 4”, nueva entrega de una de las sagas más queridas por el público. Realizada por DreamWorks (Madagascar, Shrek, por mencionar algunas sagas), Kung Fu Panda 1 tuvo una gran recepción en su estreno, pero esta cuarta parte ha recibido críticas generalmente negativas. ¿Es realmente tan mala como dicen?
Vamos por partes.
“Kung Fu Panda 4” es una historia que no se reinventa, aunque la gracia de Po y de los personajes secundarios, incluidos los villanos, sostienen la película con hilaridad y riqueza narrativa.
Más allá de que algunos personajes ya estaban bien definidos, en esta entrega su psicología humana no pertenece a lo que había diseñado su origen. Sobresalen algunos personajes, pero hay una ausencia enorme en otros, que al final puede estar justificada para poder contar una historia y alargar su trama.
Robert Greene en su libro de “Las 48 leyes del Poder” señala en su ley número 2:
“Desconfíe de los amigos, suelen ser los primeros en traicionarlo, ya que caen fácilmente presa de la envidia. También suelen convertirse en irrespetuosos y tiranos. En cambio, emplee a quien haya sido su enemigo, y le será más leal que un amigo, ya que deberá hacer mayores esfuerzos para demostrar su adhesión. Lo cierto es que usted debe temer más a sus amigos que a sus enemigos. Si no tiene enemigos, busque la forma de creárselos”.
Pasaje de “Las 48 leyes del poder”, Robert Greene.
“Kung Fu Panda 4” demuestra claramente esta regla, pero también consigue hacernos recordar las enseñanzas de la primera película: el valor, la amistad, la familia, creer en uno mismo y la disciplina.
Ahora Po deberá enfrentar a un nuevo villano y un plot twist que se veía venir desde el inicio de la cinta, porque uno se queda pensando: ¿ese nuevo personaje es necesario? ¿Tendrá alguna función en la trama o no estaría tomando acciones tan determinantes?
Personaje del cual depende todo el plan del villano. ¿En serio? Si acaso no hubiera salido el plan. Y bueno, el final me parece bastante anticlimático, pero aún así, el viaje del personaje para salvar su mundo es entretenido y bastante colorido, lo suficientemente agradable para estar un buen rato pegado a la pantalla y disfrutando.
“Kung Fu Panda 4” carece de mucha coherencia en la trama, y el plan del villano es excesivamente elaborado, cuando un plan más simple y efectivo hubiera sido más creíble. Pero claro, esto hubiera sacado de contexto a los personajes, incluido el villano, el cual se integra al mundo de los héroes.
Parecen tres tramas intentando ser un largometraje. Falta ingenio y fuerza en las acciones, que no son tan creíbles. Por ejemplo, la primera trama se olvida pronto: el bastón de la sabiduría debe pasar a manos de un nuevo guerrero. ¿Por qué? Hasta el final se justifica. La segunda trama es la villana que reside en Juniper City y quiere obtener todos los poderes para resultar inmortal y mágica. La tercera trama es un drama familiar especista, que nos repite lo mismo que las otras películas.
“Kung Fu Panda 4” no es una mala película, pero no está al nivel de las tres primeras. Incluso no supera a la primera, cuya serenidad, originalidad y creatividad a la hora de ejecutar una idea bastante simple, generó el encanto y gracia que unió a crítica y público.
Esta cinta, por el contrario, parece innecesaria. Teníamos un cierre perfecto y agradable con la película anterior. Solo deseamos que no venga una nueva entrega, porque con poca magia y coherencia y sin los cinco furiosos, no tiene nada nuevo que contar y la historia que intenta no es lo suficientemente sólida.